Skip to content

Juan Francisco Ferrándiz. Alumbrando rincones oscuros de la Historia.

Juan Francisco Ferrándiz. Alumbrando rincones oscuros de la Historia.  Juan Francisco Ferrándiz. Alumbrando rincones oscuros de la Historia.  El autor alicantino Juan Francisco Ferrándiz vuelve a adentrarse en acontecimientos poco conocidos de la Historia con su ya tercera novela “La Tierra Maldita”, trabajo que le ha llevado a reconstruir la Barcelona del siglo IX en una trama que tiene al obispo Frodoí como principal personaje.

Este es tu tercer libro, todos ellos dentro de la novela histórica, ¿es un género en el que ves saciadas todas tus inquietudes como creador?

Lo que me impulsó a escribir desde el principio fue encontrar historias dentro de la historia. Siento curiosidad y emoción al descubrir hechos perdidos en el tiempo, pero no te niego que también me atraen otros géneros. Seguro que los exploraré, pero otra cosa es publicar.

Las editoriales prefieren que el autor se mueva por una senda que ha dado buenos frutos. En mi caso, después de Las horas oscuras, Grijalbo quería que siguiera en la ficción histórica, cosa que he hecho encantado.

¿Cuál sería la proporción entre el tiempo que lleva documentarse para escribir una novela así y el tiempo empleado en escribirla?

En mi caso depende de la novela. Para Las horas oscuras y La llama de la sabiduría me documenté mucho antes de empezar a escribir la trama. La documentación ocupó más de la mitad del tiempo total.

En La tierra maldita ha sido diferente. Esta novela tiene parte de ficción pero es un relato histórico que se hallaba enterrado en un pasado muy remoto. Lo descubrí por casualidad al caer en mis manos un ensayo histórico sobre la convulsa Marca Hispánica y Barcelona en el siglo IX. Al mismo tiempo que me documentaba mezclaba los personajes históricos con los de ficción y escribía escenas. Ahora la mezcla es inseparable, pero en total he estado cerca de dos años.

El valor divulgativo de la novela histórica es un parámetro a tener siempre en cuenta o ha de primar la trama y sus personajes aunque eso suponga alejarse demasiado de los hechos históricos, ¿es cuestión de alcanzar un equilibrio entre ambos?

Para mí, en la ficción histórica debe primar la trama y los personajes. Eso no significa que el contexto pueda descuidarse. Hay que ser pulcros pues los lectores de este género detectan cualquier error rápidamente.

Como decía Umberto Eco, existe un pacto y hay que respetarlo. El lector acepta adentrarse en un relato en parte ficticio, pero éste no debe chirriar. Además los lectores de este género, yo me incluyo, deseamos vivir una buena historia y bien ambientada, no hacer un cursillo de historia. Con todo, la novela histórica siempre deja un poso que ayuda a conocer mejor el pasado.

¿Qué aspectos te han resultado más difíciles de recrear a la hora de escribir la novela para describir cómo era la Barcelona del siglo IX?

Lo más difícil ha sido tejer un entramado equilibrado de historias personales y que la trama fluya en su conjunto. Quería que el lector viviera no sólo las argucias de un obispo, sino las sombras de la hechicería, el tesón de los plebeyos, las ambiciones de la nobleza, los conflictos, los secretos que escondía la Marca… Buscaba la inmersión en un tiempo oscuro y desconocido a través de varias vidas interconectadas.

No son buenos tiempos para la creación literaria aunque no es el caso de la novela histórica, género que va ganando popularidad de forma constante, ¿qué tiene la novela histórica para conseguir conectar con el público? ¿qué debería aportar a la literatura para no ser considerada un género menor para cierta crítica?

Aunque también es un género saturado, sigue ocupando mesas de novedades en las librerías. Creo que lo más atractivo es que el pasado nos conecta con lo misterioso. De allí proceden los mitos, las gestas heroicas, los secretos ocultos, lo olvidado… Buena parte de lo que ocurre hoy en día no tendrá interés literario hasta que pase mucho tiempo y se envuelva de brumas.

En cuanto a la última pregunta, es cierto que libreros y lectores aficionados al género me comentan cierto hastío ante lo que consideran un exceso de libros pero escasos relatos originales. Eso me preocupaba a la hora de escribir La tierra maldita. No quería que fuera un melodrama típico, calzado en el siglo IX, sino descubrir los increíbles juegos de poder y proezas épicas que ocurrieron en ese tiempo de oscuridad. Espero haberme acercado a lo que los lectores buscan. De momento las críticas son buenas y va a ser traducido a 12 idiomas.

“La tierra maldita” Editorial Grijalbo 20,81 Euros 672 páginas

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies